lunes, 27 de diciembre de 2010

Como todos los años

Como todos los años, hemos celebrado juntos la merienda solidaria. Hemos compartido el riquísimo chocolate y los churros, hechos por las monjas; hemos esperado ansiosos que se oyera nuestro número en la rifa, también como todos los años. Ha habido un pequeño caos a la hora de llegar y conseguir acomodarnos todos, también como todos los años, porque quizá seria recomendable que nos acordáramos de coger las invitaciones con antelación, para que se pueda organizar la merienda sabiendo el número exacto de las que vamos a ser. Seguro que no os gustaría que se os presentaran a cenar 25 personas en vuestra casa, cuando esperabais a 10. El año que viene hay que intentar organizarse.
Aunque tenemos que reconocer que nos sentiríamos defraudados, si no se repitiera ese ritual anual de caos, besos, abrazos y reencuentros. Y, aunque todos los años nos proponemos vernos más a menudo y participar en todas las actividades de la Asociación, la verdad es que el ajetreo diario, el trabajo, los niños y todo lo que rodea nuestra vida, hace que no cumplamos nuestros propósitos. Al final, a lo que nunca faltamos es al chocolate y la rifa de Navidad.
De todos modos, hemos conseguido el propósito de dicho chocolate solidario: recaudar dinero para el hospital materno infantil de Monvu, en Idjwi ( R.D. del Congo), para ofre
cer a los niños un lugar digno donde nacer, en uno de los sitios más pobres del mundo. Crear un "portal de Belén" más acogedor y seguro para tantos niños que, como Jesús, llegan al mundo en condiciones absolutamente precarias. Celebrar la Navidad siendo los pastores que llegan con lo que tienen y no los dueños de las posadas, que no tuvieron un hueco para acoger a los que necesitaban tan poco, que no recibieron nada. Para que todos los “Niños Jesús” que nazcan en Monvu tengan una cuna y no tengan que ponerlos en un pesebre.
¡ FELIZ NAVIDAD ¡ ¡ FELIZ AÑO NUEVO ¡