Ante esta situación y movido por la curiosidad, un súbdito quiso averiguar el secreto del soberano para no dejarse deslumbrar por el oro, las joyas y los lujos excesivos que caracterizaban a la nobleza de su tiempo.
Inmediatamente después de los saludos que la etiqueta y cortesía exigen, el hombre preguntó: Majestad, ¿cuál es su secreto para cultivar la vida espiritual en medio de tanta riqueza?
El rey le dijo: “Te lo revelaré, si recorres mi palacio para comprender la magnitud de mi riqueza. Pero lleva una vela encendida. Si se apaga, te decapitaré”.
Al término del paseo, el rey le preguntó: “¿Qué piensas de mis riquezas?”
La persona respondió: “No vi nada. Sólo me preocupé de que la llama no se apagara”.
El rey le dijo: “Ese es mi secreto. Estoy tan ocupado tratando de avivar mi llama interior, que no me interesan las riquezas de fuera”.
han comunicado su RICA experiencia de solidaridad en la FISC de Valladolid
ResponderEliminarPor ser una hora demasiado tardía no pudieron acudir todos los invitados pero tenemos el proyecto de ser comunicadores los que pudimos participar.
Que corra la BUENA NOTICIA. Hasta el próximo encuentro , a mejor hora.
Eran once AA.AA. de "La Enseñanza " , en Valladolid...las que nos informaron de actividades en la FISC...
EliminarSe cortó el texto.
Perdón.
Saludos